Rosa, desfile en el Hotel Montiboli, primeros años 80
Puede ser
Puede ser que el recuerdo
desvirtúe la realidad
y que además la modifique
en beneficio propio.
Es posible, por tanto,
que no seas tan bella
como apareces en el centro
de mi imaginación,
tercamente convulsa.
Puede ser que no tengas
un glosario de muertes en tus curvas
ni una hueste de imanes
concitando mil gatos en tus pechos.
En fin,
puede ser que tu cuerpo,
aun siendo una manzana newtoniana,
no tenga el atractivo
de la Gravitación Universal.
O sí, quién sabe.
Lo que es indiscutible
es que hay un hombre como yo
que, adicto a la belleza,
no ha logrado jamás
desvincularte de sus sueños.
Ni va a lograrlo ahora
porque sigue soñándote con una
nocturnidad actualizada
y con una creciente alevosía.
Del libro Amores
colaterales (2006)
Mariano Estrada www.mestrada.net
Paisajes Literarios
HERMOSO POEMA
ResponderEliminarGracias, Marisol: me alegra verte por estos pagos. Un abrazo
ResponderEliminarBello poema de amor!
ResponderEliminarGracias, Olga: en las cosas del amor, todo razonamiento es inútil. Un abrazo
ResponderEliminarMariano. Hermoso, como todas tus letras. Gracias por compartir. Un abrazo grande!
ResponderEliminarGracias a ti, Olga, por ser tan generosa en los elogios. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarSimplemente... ¡divino!
ResponderEliminarHola, Sofía: el adjetivo divino nos puede remitir a Dios o a los dioses. Pero yo me quedo con la tercera acepción del Diccionario de la RAE: excelente o primoroso. Gracias, es un calificativo muy alto. Un abrazo
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